Las idas y Vueltas de Oracle

Sun (ahora propiedad de Oracle) siempre me genero sentimientos encontrados como defensora de los principios del software Libre. Y lo que está sucediendo con OpenOffice lo único que hace es confirmar mi desconfianza.
Hace algunos meses comenzamos a transitar una espectacular novela: la gente de Sun envolvía en un misterio el futuro abierto de OpenOffice, la suite de oficina libre y gratis por excelencia, que para muchos era considerada la mejor opción ante alternativas propietarias como Microsoft Office. Adelantándose a la decisión de cerrar el proyecto, la gente de The Document Foundation creo un fork de OpenOffice para comenzar a transitar un camino alternativo al incierto OpenOffice. Ahora parece que la gente de Sun liberaría OpenOffice y la Document Foundation seguiría trabajando en él, con un ¿“nuevo” cambio de nombre? (lo lógico es que se llame OpenOffice de nuevo ¿no?). Si bien estamos ante una noticia festejable, estas idas y vueltas desgastan y mucho. Siempre me gusta ejemplificar todo: Instale LibreOffice hace un tiempo en la PC de mi padre y le costó mucho el cambio… Ahora va a pensar que se trata de un nuevo programa y que tendrá que migrar de nuevo. Si vamos más allá veo cosas que no me gustan, Ubuntu 11 saldrá con LibreOffice, pero en la edición de octubre seguramente con OpenOffice nuevamente. En fin, estos nubarrones desgastantes hacen que otras alternativas ganen lugar en vez de afirmarse estos proyectos como una alternativa estandarizada, real e integrada. Todo esto me da la sensación de que “no hay un plan”, las cosas se van dando y las vamos sacando al mercado, mientras nosotros, seguimos apostando e idealizando.